By Tsu.
Hace mucho tiempo me dieron una receta de queque de zanahoria, la cual llevaba harina de trigo normal. Siempre me dio miedo hacer queques por el miedo a que se bajaran o se arruinarán, pero esta receta es tan simple de hacer que a la primera de haberlo intentado, salió a la perfección. Tiene la cantidad precisa de dulzor, y el rico sabor de la zanahoria.
Cuando dejé de consumir gluten, cambié la receta por harina de arroz… Con sólo harina de arroz queda bien, pero mucho más denso y se demora muchísimo más en cocinarse. En ese momento no sabía cómo hacer que las harinas fuesen más “amigables” para cocinar, y la harina de arroz era la única en ese momento a la que podía acceder fácilmente.
Después de ello probé con algunas premezclas, y con algunas locales, funcionaba muy muy bien. Así que desde ese momento comencé a probar premezclas del mercado, y también comencé a indagar un poco más en cómo hacer que las harinas más “duras” fuesen más trabajables, sobre todo para que quedasen más esponjosas.
Ahora último reemplacé el azúcar de la mezcla por miel, y queda excelente. La miel que utilicé no era líquida, pero estaba blandita, porque no estaba refrigerada, lo que hizo que fuese fácil trabajarla ya que esta mezcla no se prepara con batidora/mixer (Nada metálico, quizás puedas probar con paletas de plástico).
Queque Zanahoria y miel.
Para la mezcla:
- ½ taza aceite vegetal.
- ¾ taza miel.
- 3 huevos enteros.
- 1 taza zanahoria rallada.
- 2 tazas harina sin gluten (Yo utilizo la premezcla Bread Mix de Schär).
- 3 cditas de polvos de hornear.
- Nueces/almendras, o algún fruto seco de tu gusto (Opcional).
Preparación:
Precalentar el horno a 180ºC.
Unir el aceite con la miel. Es complicado, trata de hacerlo lo mejor posible, pero quizás no te quede completamente mezclado, no hay problema. Después se agregan los 3 huevos enteros de a uno. Con el primero notarás que la mezcla de aceite y miel se unen fácilmente. Una vez mezclado todo, añade la taza de zanahoria rallada. Revolver todo muy bien con cuchara de palo, o paleta plástica, nunca metálico, y por último añadir las 2 tazas de harina con los polvos de hornear cernidas lentamente para mezclar bien y evitar que queden grumos. La mezcla Schär que utilizo yo forma grumos en esta mezcla en particular, por lo que recomiendo hacerlo lentamente, porque el resultado final es mucho mejor. La mezcla debe dar una consistencia más o menos licuada. Si reemplazas la miel por azúcar, la mezcla será más espesa, pero no debería necesitar nada de agua.
Dejar en horno precalentado por 30-40 min a fuego medio-bajo y retirar del horno cuando la punta de un palito salga seca.
Desmoldar y dejar enfriar. Yo lo serví con helado y queda genial :).
¡A disfrutar!